Uno de los mitos más grandes por los que la gente evita comprar una casa es la suposición de que hay que hacer un pago inicial del 20%. Sin embargo, es posible comprar una casa sin pago inicial (o con un pago inicial muy bajo) a través de programas de crédito hipotecarios del gobierno y otros programas no gubernamentales, que exigen un 3.5% o menos para comprar una casa. Además de opciones de pagos iniciales más bajos, estos préstamos suelen exigir requisitos de elegibilidad más amplios.

Préstamos de la FHA

El pago inicial de un préstamo de la FHA puede ser de tan solo el 3.5% con una calificación de crédito mínima de 580, o del 10% para calificaciones de crédito de 500 a 579. Este préstamo respaldado por el gobierno, asegurado por la Administración Federal de Vivienda (FHA), es una opción popular para quienes buscan comprar su primera casa o para aquellos que no tienen una calificación de crédito muy buena.

Préstamos de la VA

Otro préstamo respaldado por el gobierno con opciones de pagos iniciales aún más bajos es el préstamo de la VA. No requiere un pago inicial si el precio de venta de la casa no supera el valor tasado de la propiedad y el comprador califica para el programa. El personal en servicio activo, los reservistas, los miembros de la Guardia Nacional y algunos cónyuges sobrevivientes pueden ser elegibles para este tipo de préstamo.

Opciones de LTV del 97% de Fannie Mae

Fannie Mae (la Federal National Mortgage Association) ofrece dos programas de préstamos con opciones de pagos iniciales del 3%. El programa estándar exige que al menos uno de los solicitantes del préstamo esté comprando su primera vivienda.  Sin embargo, su préstamo HomeReady no tiene este requisito y también permite que el pago inicial provenga de fuentes como donaciones, subvenciones y subsidios.

Hipotecas Home Possible de Freddie Mac

Freddie Mac (la Federal Home Loan Mortgage Corporation) ofrece la hipoteca Home Possible con un requisito de pago inicial de tan solo el 3%.El dinero para el pago inicial puede provenir de familiares, programas de asistencia del empleador, financiación secundaria e incluso aportes de mano de obra.

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