1. Deja de usar tus tarjetas de crédito.
Si necesitas ayuda para pagar tus tarjetas de crédito, el primer paso es dejar de usarlas completamente. Quizás sea más fácil decirlo que hacerlo, pero funciona. Las tarjetas de crédito son muy fáciles de usar, puedes gastar de más sin siquiera pensarlo y luego tienes la tentación de no cancelar el saldo total. Entonces, el primer paso de cualquier plan de cancelación de crédito es dejar de usar las tarjetas para realizar más compras.
2. Busca una solución realista para tu deuda.
Reúne la información de todas tus tarjetas de crédito: tus cuentas en línea, facturas en papel que den cuenta de todas las tarjetas de crédito y de tiendas que tengas. Calcula los saldos totales para saber exactamente de cuánto es la deuda que tienes y elaborar luego un plan efectivo para cancelarla toda.
3. Comienza el mes con un presupuesto.
Crea un presupuesto cada mes de los gastos e ingresos previstos. Esto puede dejar entrever cualquier oportunidad ignorada de destinar más de tu ingreso a la reducción de la deuda. También te da una sensación de cuán rápido suman las “pequeñas cosas”. Si bien puede ser algo tedioso, armar un presupuesto puede tener un impacto enorme en tu estrategia a largo plazo para eliminar la deuda.
4. Realiza los pagos puntualmente.
Siempre envía los pagos a tiempo. Los acreedores a menudo multan los pagos tardíos con una tasa de interés más alta, lo que significa que una parte de tu pago se usa para pagar los intereses en lugar de ir amortizando el saldo. Entonces, más allá de si pagas en línea o por correo, haz el pago con suficiente tiempo para que llegue al destinatario puntualmente.
5. Haz más que solo pagos mínimos.
Si solo haces pagos mínimos todos los meses (que por lo general equivalen a un 1–2% del saldo total), apenas verás un movimiento en tu deuda y terminarás pagando mucho más dinero a largo plazo que lo que habías gastado en un principio. Incluso duplicar el pago mínimo puede alejarte del objetivo de reducir la deuda.
6. Concéntrate en las tarjetas que tengan saldos bajos o tasas de interés más altas en primer lugar.
Algunos expertos financieros sugieren que canceles primero la deuda de la tarjeta de crédito que tenga el saldo más pequeño. Esto te da la sensación de éxito inmediato y te ayuda a ganar impulso. Otros expertos recomiendan que canceles primero las tarjetas de crédito con la tasa de interés más alta, lo que te permite ahorrar dinero en intereses acumulados. De cualquier manera, el objetivo es avanzar en el plan de cancelación de tus tarjetas de crédito.
7. Solicita reducciones en la tasa.
Si bien puede parecer extraño llamar a la compañía emisora de tu tarjeta de crédito para solicitar una tasa de interés más baja, a veces funciona de verdad. Ninguna compañía quiere perder la relación contigo, por lo que ciertos prestamistas reducirán tu tasa de interés para conservarte como cliente. Cuando llames, sé respetuoso pero habla con convicción. Y si ves que no están dispuestos a colaborar, solo hazles saber que estás pensando en transferir tu saldo a otra compañía de tarjetas de crédito que te ofrece una tasa más baja. Cancelar tus tarjetas de crédito no es una tarea fácil. Sin embargo, es posible recortar la deuda de la tarjeta de crédito si tomas decisiones inteligentes con tu dinero.
Cancelar tus tarjetas de crédito no es una tarea fácil. Sin embargo, es posible recortar la deuda de la tarjeta de crédito si tomas decisiones inteligentes con tu dinero.