Cómo se determina el costo del seguro de vida
A continuación se presentan factores comunes que determinan las tarifas de seguro de vida:
Monto de la cobertura: Al igual que otros tipos de seguro (por ejemplo, de auto o de vivienda), los montos de cobertura más altos cuestan más.
Cantidad de tiempo: Un período de cobertura más largo tendrá tarifas más altas que un período de cobertura más corto.
Antigüedad: Por lo general, cuanto más joven seas, menos costosa será tu póliza de seguro de vida. La probabilidad de que alguien muera generalmente aumenta a medida que envejece, por lo que una póliza con los mismos plazos costará menos para una persona de 20 años que para una de 65 años. La regla general es que cuanto antes obtengas una póliza, menos costará la prima anual.
Sexo: El seguro de vida para mujeres suele costar un poco menos que para hombres porque viven más tiempo, según las estadísticas de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
Salud: Si eres fumador, es probable que la póliza te cueste más, dados los riesgos de salud asociados con el tabaquismo. Quienes tienen condiciones preexistentes como la diabetes también pueden tener primas de seguro de vida más altas que quienes no las tienen, incluso aunque esta condición está bien controlada. Si tienes otras condiciones médicas, el costo también puede verse afectado.
Ocupación: Tu trabajo es importante cuando se trata de tarifas de seguro de vida. Si tu trabajo tiene una tasa de riesgo más alta que una ocupación típica en la oficina, puedes estar en una categoría de seguro más costosa.
Comportamientos: Los hábitos y las actividades, como las multas por exceso de velocidad u otras infracciones en tu historial de conducción o la participación en deportes extremos como el paracaidismo, también pueden afectar la tarifa de tu seguro de vida, ya que indican cuán seguro estás.